El mistol, Ziziphus mistol, cuenta con numerosas sustancias bioactivas que lo hacen beneficioso para la salud humana

 

Por Ing Agr. Mg Eve Luz Iñiguez, Sra.Nancy Campos y Dra. María Judith Ochoa

 

INFORMACIÓN
Los frutos de especies arbóreas difundidas en el Chaco Americano, con potencial nutricional, medicinal, tintóreo, económico y social se encuentran escasamente valorados y explotados. Una gran parte no se colecta, se pierde por inclemencias climáticas y otras pequeñas cantidades son destinadas a la venta artesanal de diversos productos como el que se describe en este escrito.

La provincia de Santiago del Estero se encuentra en el gran Chaco Americano. Ubicada al Norte de la Argentina, cuenta con una importante superficie de monte nativo. De ellos surgen plantas de las que se obtienen frutos comestibles y con beneficios para la salud humana y también como alimento para la fauna silvestre. Según investigadores del INTA de Santiago del Estero y de la Universidad Nacional de Santiago del Estero (Facultad de Agronomía y Agroindustrias), esta especie junto a otras como el algarrobo blanco Prosopis alba y la tusca Acacia aroma:

“Cuentan con sustancias bioactivas en sus diferentes tejidos, tales como hojas, tallos y frutos, lo cual permite ser considerada una fuente interesante de obtención de conservantes naturales e ingredientes con actividad antimicrobiana”

 

El mistol puede ser procesado para la obtención de alimentos con alto valor añadido

El mistol, Ziziphus mistol (Carrizo y Palacio, 2010), destaca por su abundancia (Gimenez et al., 2015) en todos los montes nativos de la región chaqueña. Desde antaño, esta planta ha aportado alimento para las personas de zonas rurales y las mismas han aprovechado todas las partes de la misma para su beneficio. Uno de los productos comestibles que se ha mantenido durante el tiempo es el ¨Bolanchao¨.

Nancy Campos, emprendedora santiagueña (Inti Atun-Sol grande) y conocedora de la mayoría de las plantas autóctonas de la provincia de Santiago del Estero, cuenta como se hace este producto que hoy en día sigue teniendo vigencia entre las personas que viven o han pasado por esta provincia:

  1. Se cosecha el mistol sobre un plástico para evitar contaminaciones y asegurarse que el fruto este bien maduro.
  2.  En un mortero se muele hasta formar una pasta, sin ningún agregado.
  3. Esa pasta se pone en el puño de la mano, se compacta bien y se le da forma de espera o ¨bola¨, se las deja secar y luego se las pasa o reboza por harina de maíz tostado o harina de algarroba (Sarmiento, 2017).

Es una golosina que es valorada entre los niños y jóvenes en el campo especialmente en toda la familia, más aún en época de invierno.

Nancy  realiza varios procesos que añaden valor a los frutos del monte santiagueño, entre ellos el mistol, y produce jarabes para mejorar procesos catarrales (sin conservantes- es muy energizante dados la cantidad de azucares naturales que contiene, mermeladas, café torrado, arropes, bolanchao, y panificados (que surgen con la harina de mistol).

“La costumbre es en la producción es que todo sea cosechado un poco más para que en la próxima cosecha se devuelva a la tierra para contribuir con el mejoramiento del suelo y a la naturaleza y que la misma nos siga dando más comida”.

Limitaciones al cultivo y procesado del mistol

Aunque no está contemplado en el Código Alimentario Argentino como un “Alimento”, el mismo se usa para este efecto ancestralmente. El fruto del mistol una vez cosechado puede durar bien guardado hasta 2 años.

Es así como los frutos de mistol,  Ziziphus mistol, Prosopis sp. actualmente subutilizados, a pesar del mayor conocimiento de los beneficios que presentan, estos frutos pueden ser utilizados en la elaboración de distintos productos, tales como, alimentos y aditivos alimentarios, forrajes, productos fotoquímicos, compuestos medicinales y tintóreos, aceites, resinas, gomas, entre otros.

Sin embargo, hay factores a resolver en estas especies del monte nativo, que son críticas para una producción continua. Entre ellos, destacan el mejoramiento genético, sistemas productivos más eficientes, organizativos, estructurales económicos y tecnológicos que faciliten la toma de decisiones, manejo en plantaciones destinadas a la producción de fruta. Cosecha segura, manejo sanitario en el acopio.

Bibliografia

Carrizo, E., & Palacio, M. (2010). Árboles y arbustos nativos como recurso forrajero en Santiago del Estero, República Argentina. VII Simposio internacional sobre la flora …. http://www.sistemamid.com/panel/uploads/biblioteca/7097/7098/7110/7114/82915.pdf

Gimenez, A., Rios, N., Hernandez, P., & Cavilla, C. (2015). Crecimiento de arboles individuales de Mistol(Zizipphus mistol Griseb) , especie importante del Chaco Argentino. Revista Mexicana de Ciencias Forestales, 6(31), 68-81.

Sarmiento, M. (2017). Consumo de productos forestales no madereros en el ámbito urbano: el caso de harinas de frutos de árboles de bosques nativos en el norte de Argentina. En Ingeniería Solidaria 13(23). https://doi.org/https://doi.org/10.16925/in.v23i13.2008

Aportes de la FAyA para el Desarrollo Agropecuario y Agroindustrial del NOA : tomo 1 : cadena de valor en sistemas agrícolas y otros trabajos / Ada S. Albanesi … [et al.] ; compilado y editado por Ada S. Albanesi ; ilustrado por Soledad Roman ; prólogo de Alejandro Rios ; Jose Maidana ; Jose Manuel Salgado. – 1a ed. compendiada. – Santiago del Estero : Universidad Nacional de Santiago del Estero – UNSE. Facultad de Agronomía y Agroindustria, 2017. v. 1, 36

 

Imagen

Fuente: Arborea: http://arborea.proyungas.org.ar/especie/159#/

 

Agradecimientos
Al Ing. Agr. Mariano Winograd, mariano.winograd@gmail.com, por el contacto con las autoras