Un estudio canadiense encuentra relaciones entre el consumo de bebidas azucaradas y cáncer de próstata
Las frutas son fuentes de azúcares saludables
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Crece el número de estudios científicos que relacionan el consumo de azúcares agregados con diferentes afecciones en la salud. También las evidencias de que es mejor consumir una fruta entera que el zumo que se extrae de ella, en el que nos falta su riqueza en fibras.
El Español publica un artículo “Cáncer de próstata: esta es la dieta que ayuda a prevenirlo” en que explican los resultados de un estudio realizado en Canadá en que se comparan tres tipos de dieta.
La Sociedad Canadiense del Cáncer estima que hasta 23.000 canadienses serán diagnosticados de cáncer de próstata durante 2020. Y, a pesar de que existen muchos factores de riesgo relacionados con esta enfermedad, cada vez son más los estudios que se han centrado en la dieta como factor de riesgo, cuya implicación está más que demostrada en otras patologías como la enfermedad cardiovascular, diabetes y obesidad, entre muchas otras.
El equipo dirigido por la profesora Marie-Élise, junto a la estudiante de doctorado del INRS, Institut National de la Recherche Scientifique, Karine Trudeau, usando datos de un estudio realizado en Montreal entre los años 2005 y 2012, identificaron una relación entre la dieta y el cáncer de próstata analizando hasta tres perfiles dietéticos diferentes.
Entre los perfiles dietéticos estudiados se encuentran: una dieta saludable, una dieta occidental rica en sal y alcohol, y una dieta occidental rica en bebidas azucaradas.
– La dieta saludable se basa principalmente en frutas, verduras y proteínas vegetales como el tofu o frutos secos.
– La dieta occidental rica en sal y alcohol se basaría en un alto consumo de carne y bebidas como cerveza y vino.
– La dieta occidental rica en bebidas azucaradas se basaría en un elevado consumo de pasta, pizza y comida rápida en general, postres ricos en azúcar y refrescos.
El riesgo de una dieta rica en azúcar
Tras tener en cuenta factores como la edad, raza, nivel educativo, antecedentes familiares y fecha del último examen de detección de cáncer de próstata, los investigadores detectaron una relación: la dieta saludable reduciría el riesgo de cáncer de próstata.
Por el contrario, una dieta occidental rica en azúcar se asociaría con un mayor riesgo de sufrir cáncer, sobre todo en sus formas más agresivas.
Sin embargo, paradójicamente, el estudio no encontró una relación entre la dieta occidental rica en sal y alcohol y el riesgo de sufrir este tipo de cáncer.
En este caso, destacan las investigadoras, su enfoque no fue la búsqueda de un nutriente o grupo de alimentos en especial, sino de patrones dietéticos más amplios, dado que aislar el efecto de un solo nutriente es muy complejo.
De hecho, según los científicos, las personas deberían fijarse más en un estilo dietético determinado y no tanto en uno u otro nutriente, dado que se sabe que existen sinergias e interacciones entre los diferentes tipos de nutrientes que pueden empeorar una determinada situación.
El estudio, por tanto, ha analizado los hábitos alimenticios de forma conjunta, con el objetivo de elaborar estrategias de prevención contra el cáncer de próstata, siendo este el tipo de cáncer más común entre los hombres en el país norteamericano y en muchos otros países.
Nuestro paladar pide azúcar y reconoce los buenos azúcares
Para muchos, algo dulce es una demanda del organismo. En ellos hay un factor de acostumbramiento. Si estamos habituados al consumo de alimentos con un alto nivel de azúcar, eso es lo que demandará nuestro organismo.
Pero, es posible cambiarlo. Tras pocos días de consumir frutas y, cuando nos viene “el mono del azúcar”, recurrimos a los frutos secos –albaricoques, pasas de uva, higos, dátiles, …- el organismo entiende y agradece el mensaje, y se satisfará con estos azúcares inocuos.
El cambio suele ser mucho más fácil de lo previsto. Lo único que quizás cuesta un poquito de esfuerzo es la primera decisión diferente. Más allá de ella, lo bien que nos sentimos consumiendo una fruta en vez de bollería, por ejemplo, nos cambia rápidamente la percepción y hacia dónde se enfocan nuestros deseos de consumir dulce.
También son cada vez más frecuentes las evidencias del carácter adictivo tanto de los azúcares como de las harinas (que no dejan de ser azúcares concentrados). Si salimos de ellos, el mundo de los “dulces naturales” frutas en fresco y deshidratadas, nos aparece en todo lo que tiene de disfrutable y diverso. El primer bocado de cada fruta, es un descubrimiento.
Cada unidad es diferente y … esto es algo que también aporta al disfrute. En ACTUAL FruVeg tenemos 3 propuestas: come más frutas y verduras, más legumbres y frutos secos y activa la vida social; y resaltamos el “más frutas y verduras y menos azúcar”.
La imagen es de PersonalRunning, ¿Por qué son perjudiciales las bebidas azucaradas?
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