Considerados caramelos de la naturaleza, los dátiles contienen minerales y vitaminas, y numerosos compuestos bioactivos que actúan como agentes terapéuticos eficaces contra varias enfermedades

 

Beatriz Riverón,
Bioquímico farmacéutica

 

INFORMACIÓN
La palmera datilera (Phoenix dactylifera familia Arecaceae) es muy cultivada por sus frutos comestibles, los dátiles. Debido a que desde hace milenios se desconoce su área natural de distribución, pero se habría originado en los oasis de la zona desértica del norte de África, aunque hay quienes admiten un origen en el suroeste de Asia. Es una palmera de tamaño mediano, de 15 a 25 m de altura.

Los dátiles son frutos de color rojizo y fibrosos, de sabor dulce.

El dátil suele consumirse en forma seca. Se compone principalmente de carbohidratos y tiene una variedad de vitaminas y minerales, como las vitaminas A, C, complejo B y antioxidantes, incluidos el betacaroteno y la luteína. Fuente de fructosa, el dátil tiene un sabor sutil, es una buena fuente de energía y de fibras.

Los dátiles se consideran un alimento nutritivo y pueden desempeñar un papel importante en la salud. Además, tienen propiedades antimicrobianas, antitumorales e inmunomoduladoras.

Principales beneficios de la fruta

La palmera datilera se encuentra entre los cultivos frutales más antiguos del mundo y se cultiva principalmente por sus frutos altamente nutritivos que se consumen como alimento básico en muchos países, especialmente en la región del Golfo. Los dátiles sor ricos en numerosas sustancias bioactivas terapéuticas y compuestos funcionales como fenoles, flavonoles, carotenoides, minerales y vitaminas que no solo proporcionan una cantidad apreciable de energía requerida por el cuerpo humano, sino que también actúan como agentes nutracéuticos eficaces contra varias enfermedades.

Los frutos se consideran una dieta completa porque también contiene diferentes ácidos grasos, aminoácidos, proteínas y sustancias esteroidales.

– Contribuyen al buen funcionamiento del intestino porque son ricos en fibras insolubles como celulosa, fundamentales para prevenir el estreñimiento, además de beneficiar el tránsito intestinal. Estas sustancias también proporcionan saciedad y ayudan a controlar el peso.

– Son una buena fuente de energía. Los dátiles aportan energía, por su cantidad de hidratos de carbono: 100 gramos rinden en media, 314 kcal. Incluso se ha estudiado como una buena opción para un pre-entrenamiento.

– Favorecen el fortalecimiento muscular, ya que son fuente de potasio y magnesio, minerales esenciales para la contracción muscular.

– Ayudan a fortalecer el sistema inmunológico ya que contienen zinc, vitamina B y antioxidantes, aumentando las defensas del organismo.

Previenen la anemia por su contenido en hierro. El consumo regular de estas frutas ayuda en el transporte de oxígeno a las células del organismo, previniendo enfermedades. La falta de este mineral puede provocar fatiga extrema, hinchazón de las articulaciones y piel pálida, además de otras complicaciones.

Alivian el estrés ayudado a relajar y reducir la tensión, ya que son fuente de magnesio. Este mineral está relacionado con la producción de serotonina, un neurotransmisor responsable del bienestar. La fruta todavía contiene triptófano (relacionado con la formación de melatonina, una hormona del sueño).

– Contribuyen en la prevención de enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer, y ayudan a mejorar la memoria y la capacidad cognitiva, gracias a los contenidos de flavonoides y de zinc.

– Son buenos para la salud ocular, ya que contienen vitamina A, evitando el riesgo de la degeneración macular.

– Ayudan en el fortalecimiento de los huesos. Los dátiles son fuente de calcio, potasio y magnesio, encargados de colaborar con el crecimiento y buen desarrollo de nuestros huesos. Las frutas también previenen la osteoporosis, asegurando un envejecimiento saludable del organismo.

– Contribuyen en la prevención de enfermedades cardiovasculares. La enfermedad cardiovascular es una de las principales causas de muerte en todo el mundo y presenta una inmensa carga pública y económica. Se necesitan estudios sobre alimentos cardioprotectores y sus componentes bioactivos para abordar las necesidades de salud tanto personales como públicas. La fruta de dátil es rica en polifenoles, particularmente flavonoides, ciertos micronutrientes y fibra dietética, que pueden favorecer la salud vascular. También contienen carotenoides, y taninos, compuestos con propiedades antiinflamatorias y antioxidantes, que combaten los radicales libres y favorecen la salud de las arterias, ayudando a prevenir enfermedades cardiovasculares, como Infarto y accidente cerebrovascular.

– Phoenix dactylifera exhibe potentes propiedades antioxidantes tanto in vitro como in vivo. Esto permite que las frutas eviten el agotamiento de la protección intrínseca del daño celular oxidativo y ayuden a estos sistemas de defensa a reducir el daño celular. Macroscópicamente, este mecanismo puede ser relevante para la prevención de varios eventos adversos de medicamentos comunes a la quimioterapia, incluyendo hepatotoxicidad, nefrotoxicidad, gastrotoxicidad y neuropatía periférica. Si bien tales efectos solo se han estudiado en sistemas de animales pequeños, la investigación sugiere una posible aplicación a sistemas de mamíferos más complejos y tal vez una solución a algunos problemas de la quimioterapia en pacientes con sistemas hepático y nefro comprometidos.

– Colaboran significativamente en el control de la diabetes. La muerte de las células beta es la característica clave de la diabetes mellitus. El mal plegamiento del polipéptido amiloide (fibrillas proteicas que pueden depositarse en diversos tejidos como epitelial, óseo, muscular etc., perjudicando la función de diversos órganos como riñones, pulmones, corazón, intestino, cerebro etc.) de los islotes de Langerhans del páncreas se considera uno de los factores causantes esta enfermedad.

Estudios recientes sugirieron que una dieta basada en dátiles presenta varios beneficios para la salud, ya que estos frutos son muy ricos en polifenoles con efectos inhibitorios sobre la formación de amiloides anómalos, reduciendo así los niveles de agregación. Estos hallazgos destacan los beneficios del consumo de dátiles y el gran potencial de sus polifenoles como terapia potencial para la prevención y el tratamiento de la diabetes, así como para muchas otras enfermedades relacionadas con el amiloide.

Todos estos estudios destacan la importancia de consumir dátiles para vivir una vida saludable debido a las propiedades nutricionales y nutracéuticas de esta valiosa fruta, así como para enfrentar el hambre oculta o la deficiencia de micronutrientes que enfrentan los habitantes del tercer mundo. Se torna necesario explorar más el potencial de los dátiles para futuras aplicaciones medicinales y nutrafarmacéuticas.

Observación

Esta fruta también revela la presencia de tiramina, por lo que los usuarios de antidepresivos que actúan como inhibidores de la monoaminooxidasa (IMAO), deben consumirla con precaución, ya que en este caso el dátil puede provocar una crisis de hipertensión.

Fuentes
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