La ergotioneína, o ERGO, puede ayudar a combatir las enfermedades inflamatorias crónicas

 

ERGO, es un aminoácido producido principalmente por hongos. Al respecto, Katie Bohn, Penn State, explica los hallazgos de Robert Beelman, profesor e investigador de esa universidad

 

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A medida que las personas envejecen, la inflamación y la oxidación pueden contribuir a muchas de las enfermedades que asociamos con el envejecimiento, como la enfermedad de Parkinson y la enfermedad de Alzheimer. Investigaciones anteriores han encontrado que la ergotioneína, o ERGO, un aminoácido producido principalmente por hongos y que se encuentra en altas concentraciones en los hongos, puede ser una herramienta útil para combatir estas afecciones.

En un artículo reciente en la revista FUNGI, Robert Beelman, profesor emérito de ciencia de los alimentos en la Facultad de Ciencias Agrícolas de Penn State, hizo comparaciones entre ERGO y la penicilina, que son productos de hongos y tienen una influencia positiva en la salud humana, pero de diferentes maneras. . Aquí esta disponible el PDF del artículo.

“La penicilina fue un antibiótico descubierto a partir de un hongo contaminante en una placa de Petri que inició la revolución de los antibióticos y ayudó a salvar muchas vidas de enfermedades infecciosas”, dijo Beelman. “Por otro lado, ERGO es un compuesto antioxidante y antiinflamatorio poco conocido pero potente producido por hongos en el suelo y que se encuentra naturalmente en nuestros alimentos que promete ayudarnos a salvarnos de muchas de las enfermedades inflamatorias crónicas que nos aquejan más hoy en día. .”

ERGO disminuye con la edad

Según Beelman, ERGO se encuentra en altos niveles en la sangre de los humanos, pero disminuye con el envejecimiento. Investigaciones anteriores encontraron que los niveles disminuyeron significativamente más en personas con deterioro cognitivo, y estudios posteriores demostraron que las personas con numerosas enfermedades crónicas del envejecimiento tienen niveles de ERGO en sangre significativamente más bajos que las personas sanas de la misma edad.

Beelman dijo que esto sugiere que aumentar esos niveles podría ser una buena estrategia de prevención. Sin embargo, los humanos no pueden producir ERGO y deben obtenerlo de fuentes dietéticas.

“Afortunadamente, los humanos tienen un sistema de transporte dedicado y altamente específico para ERGO que lo extrae de los alimentos a los glóbulos rojos tan pronto como se consume y lo distribuye por todo el cuerpo, donde tiende a acumularse en los tejidos bajo el estrés oxidativo más alto. ”, dijo Beelman. “Esta es otra indicación de su importancia para prevenir enfermedades crónicas y por qué algunos científicos ahora se refieren a ERGO como una ‘vitamina de la longevidad'”.

Beelman señaló que, si bien se sabe que los hongos son la mejor fuente de ERGO, las plantas son la principal fuente de nutrientes en la cadena alimentaria humana.

Pero las plantas no crean ERGO por sí solas y parecen depender de los hongos en los suelos agrícolas para transmitirlos a través de sus raíces.

Si bien aún no existe una dosis diaria recomendada de ERGO basada en investigaciones, Beelman señaló un estudio anterior, que encontró que los estadounidenses consumían un promedio estimado de 1,1 mg por día, la cantidad más baja de los cinco países estudiados. Mientras tanto, las personas en Italia promediaron 4,6 mg al día.

El estudio también encontró que las personas en los EE. UU. tenían la esperanza de vida más baja, mientras que los italianos tenían la más alta en los cinco países del estudio.

Los shiitakes son especialmente ricos en ERGO

“Si los estadounidenses quieren aumentar su consumo de ERGO para llegar al rango de 4,6 mg al día, eso sería alrededor de 3 a 4 onzas –unos 100 g- de champiñones al día”, dijo Beelman. “Los hongos especiales, como los shiitakes, tienen niveles más altos de ERGO, por lo que las personas deberían aspirar a una onza (28 g) de esos al día”.

Sin embargo, Beelman agregó que dado que comer tantos hongos al día puede ser difícil, los niveles de ERGO en el resto del suministro de alimentos son críticos.

En el futuro, Beelman dijo que está interesado en aprender más sobre los beneficios para la salud de ERGO, así como en identificar prácticas agrícolas que puedan aumentar la cantidad de ERGO en los cultivos.

Otros alimentos también tienen ERGO y los más ricos son los cultivados con cero labranza

Por ejemplo, dijo que un estudio reciente realizado en Penn State encontró que había un 30 % más de ERGO en cultivos cultivados con una estrategia de labranza cero, ya que la labranza afecta negativamente los microbios en el suelo. Investigaciones adicionales respaldaron esta teoría y encontraron que los niveles de ERGO en el suelo disminuyen a medida que aumenta la labranza.

“Afortunadamente, hemos demostrado que algunas prácticas agrícolas regenerativas, como la alteración mínima del suelo durante la siembra (sin labranza), pueden mitigar este problema, permitiendo que los hongos en el suelo suministren más ERGO a nuestros cultivos alimentarios”, escribió Beelman en FUNGI. “Además, las prácticas agrícolas regenerativas ayudan a reducir la erosión del suelo y secuestran más carbono en el suelo que mitiga el cambio climático, ayudándonos a vivir vidas más largas y saludables”.

 

Fuentes: Is a little-known amino acid concentrated in mushrooms the key to healthy aging?
(Foto, Kier in)

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