El interés de los de inversores en el sector agro ha crecido en la medida que han aparecido empresas gestoras que han podido generar proyectos confiables

 

INFORMACIÓN
El auge de cultivo del pistacho, que alcanza ya casi las 60.000 hectáreas en España, responde al interés de los consumidores por productos saludables y fáciles de consumir.  Un interés similar, por los mismos motivos, atrae e los fondos de inversión. Miguel Ángel López Peña, socio y Director de Operaciones de ISFA, participa en Pistacho Fórum (marzo 2023, Tomelloso), explicando el proyecto, que aspira a liderar la producción de almendra en Europa. Cuenta con con 4500 hectáreas plantadas en 2023 y su objetivo es superar las 10.000 hectáreas en los próximos 4 años. Actualmente está en construcción una planta de descascarado en Extremadura.

En sus palabras, “ISFA es una compañía gestora de proyectos agrarios intensivos. Desarrolla proyectos agrarios bajo estándares de seguridad financiera con vocación de explotación a largo plazo.” La estrategia consiste en desarrollar una cartera de fincas para cultivos agrarios de alta rentabilidad, bajo parámetros de
cultivo intensivo y medios mecanizados de explotación, trabajando conjuntamente con inversores financieros. Se trata de implementar el know how de otros sectores a proyectos agro. Los proyectos se estructura bajo estándares internacionales de seguridad para el inversor, con criterios ESG, Environmental, Social, and Governance, medioambientales, sociales y gobernanza.

Interés de los inversores en los proyectos agro

¿Porqué participan los inversores financieros en la adquisición de tierras? El interés de determinados inversores de perfil financiero en el Agro puede ir dirigido tanto a la adquisición de tierras como a la participación en proyectos productivos.

En la adquisición de tierra, participan desde grandes fondos, que adquieren tierra en distintos continentes, al mediano inversor que compra tierras localmente. En cualquier caso, el común denominador de todos ellos es que la rentabilidad exigida a la inversión está en parámetros asimilables al sector inmobiliario. La inversión en tierras de regadío se considera una inversión segura con potencial de revalorización del activo, por lo que la rentabilidad exigida por su arrendamiento es de un solo digito.

El abandono de la actividad agraria por parte de los propietarios históricos, debido a la falta de relevo generacional, o cualquier otro motivo, permite, que determinados patrimonios familiares sean vendidos a estos nuevos inversores que no tienen tras de sí una tradición agraria o bien arrendados a empresas y proyectos confiables.

De der a izq, Josep Casas, Europistachos; Alvaro Dominguez, de TEPRO; Ramón Rivera, Atitlán;; Miguel A. López Peña de ISFA; Antonio Matallanos, de AgroBank y Ramón Pelegrí el chairman de la sesión “Inversión” del Pistacho Fórum de Tomelloso, Ciudad Real. Pelegrí es director general de Compo Expert.

Participación de inversores financieros en proyectos productivos agrarios

En términos generales la participación de inversores de corte financiero en los proyectos agro obedece en primer lugar a la expectativa de rentabilidad del proyecto mismo. Un buen ejemplo es el interés actual en los frutos secos, entre ellos especialmente almendra y pistacho.

Sin embargo, a pesar de la rentabilidad potencial de un proyecto, para que los fondos de inversión u otros inversores financieros inviertan en nuestro sector se requiere que el proyecto cumpla una serie de estándares de gestión de riesgos y seguridades y la profesionalización de la gestión.

Los proyectos agrarios en los que intervienen inversores con origen financiero suelen ser proyectos con una estructura y una gestión, que es común, o al menos muy parecida, a las estructuras de proyectos de otros sectores (infraestructuras, energías renovables, negocios concesionales, etc.) y a las que esos inversores están habituados.

En ese sentido, el interés de ese tipo de inversores en el sector agro ha crecido en la medida que han aparecido empresas gestoras que han podido generar proyectos confiables. Pero a su vez, los grandes proyectos capaces de dinamizar un sector como el de los frutos secos, poniendo a nuestro país en una posición relevante a nivel internacional se han beneficiado y se benefician de la incorporación de estos inversores de perfil financiero.

La estructura de un proyecto de estas características es similar al mostrado en el esquema superior.

La gestión agronómica

En cuanto a la gestión agronómica; la profesionalización, tanto en el análisis previo de las fincas como en la ejecución de las trasformaciones, los planes y tareas agronómicas, la introducción de tecnología, la reducción del impacto medioambiental y la visibilidad de la comercialización del producto son elementos fundamentales a tener en cuenta en la concepción del proyecto.

IFSA fondos inversiónSobre Miguel Ángel López Peña

Miguel Ángel López Peña se licenció en la facultad de Veterinaria de Zaragoza en su especialidad de Producción y economía agraria.

Cursó un MBA en el IESE y se especializó en el desarrollo y dirección de proyectos a nivel internacional relacionados con infraestructuras ,el tratamiento de Residuos , energías renovables y agroindustriales tanto en Europa como en Sudamérica, Norte América y África.

A lo largo de su carrera profesional ha ocupado diferentes cargos directivos en empresas multinacionales y fundado varias compañías.

Recientemente junto con otros dos socios fundó la empresa ISFA, de la que es, además de socio, Director de Operaciones. ISFA es un proyecto que aspira a liderar la producción de Almendra en Europa con 4500 hectáreas plantadas en 2023, un objetivo de mas de 10.000 Has en los próximos 4 años y una industria auxiliar de descascarado actualmente en construcción en Extremadura.

Informaciones relacionadas

Gran participación en el Pistacho Fórum de Tomelloso, Ciudad Real

Domo Pistachio un proyecto de integración vertical “Del campo a la mesa”

EuroPistachios, valorización del pistacho transformándolo en el mejor snack

El “Proyecto Filiere Pistachos” de Auchan aspira a comercializar mil toneladas de producto acabado